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viernes, 2 de marzo de 2012

Estaría toda la vida contigo.

-¿Por qué lo has hecho?
-¿Hacer qué?
-Pues que podrías haber tenido cualquier cosa en el mundo, y me has pedido a mi.
-Es que yo no quiero ninguna otra cosa en este mundo.

tk.


Entonces coges los auriculares y pones la música tan alta que te duelen los oídos y la gente a tu alrededor mueve los labios pero no consigues ni tan siquiera imaginar lo que están diciendo.
Y el ritmo de tu corazón acelerado y tus lágrimas a punto de precipitarse por tu mejilla, se ajustan a cada compás, abandonan su propio ritmo para seguir el de la música, y en ese momento consigues evadirte.
Y con un suspiro, te abandonas del todo... Porque cuando estoy contigo, me siento como en un juego
Donde tú eres el balón y cuando llegas hasta mí
no puedo moverme, no puedo hacer absolutamente nada
Y toda esa jugada que tenía pensada se borra, parece abandonarme
y toda mi atención se centra en ti,
como si no pudiese ni tan siquiera pensar.
Y creo que va a ser eso, sí,
porque cuando intento ir un paso más allá,
cuando intento acercarme tan solo un poco más
cuando tengo preparada toda una conversación
llegas tú, y me bloqueas totalmente.


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